¡Por fin pongo la receta del roscón de reyes! Llevo haciéndolo yo en casa desde hace un par de años, pero se me acaban pasando las fiestas y ya la dejo para mejor momento. Bueno, pues esta vez sí. La receta que os traigo es la del famoso roscón de Prado Camacho, un roscón que se elabora sin masa madre, por lo que acortamos considerablemente el tiempo de elaboración ya que de otro modo se hace muuuuuuyyy laborioso. He probado otras recetas con masa madre mucho más trabajosas y creo que el sabor y la textura de este no les tiene ninguna envidia, así que para qué complicarse la vida. Y saber que uno está comiéndose un roscón hecho en casa, sin ningún tipo de conservantes ni otras cosas que llevan lo que compramos en las grandes superficies, eso es lo mejor de todo. Pongámonos manos a la masa... ¡Ah, y no olvidéis el haba y la figura, como manda la tradición!
Ingredientes:
Elaboración:
1. Pulverizamos el azúcar 20 segundos a vel. 10 y añadimos la piel de naranja y de limón, pulverizando 15 segundos a vel.10.
2. Incorporamos la leche y programamos 4 minutos, 37º, vel.1.
3. Agregamos ahora la levadura de panadero, los huevos, el aceite y el agua de azahar y programamos 10 segundos a vel.4.
4. A continuación añadimos la mitad de la harina y mezclamos 15 segundos a vel.6. Después incorporamos el resto de la harina y amasamos 1 minuto en vel. espiga. Dejamos levar la masa dentro del vaso hasta que doble su volumen (se saldrá por el bocal). El tiempo de levado es relativo, porque depende de la temperatura ambiental.
5. Desgasificamos la masa bajándola con la espátula y amasando 1 minuto en vel. espiga. Ya podemos sacar la masa de la máquina. En este paso decidimos si queremos hacer un solo roscón o dos, en cuyo caso dividiríamos la masa en dos porciones. Yo hice uno sólo, aunque sale bien grandote.
6. Para manejar la masa, nos untamos la manos de aceite, formamos una bola y la ponemos sobre la bandeja del horno cubierta con papel vegetal. Hacemos un hueco en el centro de la bola con los dedos y le damos forma de roscón, estirando poco a poco hacia afuera. Para que al subir no pierda la forma, le colocamos en el centro un aro de emplatar o simplemente algún recipiente circular que aguante el calor, como un bol o un vaso.
7. Pintamos el roscón con huevo batido y de nuevo dejamos que doble su volumen. Una vez que haya levado ya podemos decorarlo con fruta escarchada, almendras laminadas y azúcar humedecido con un poco de agua (para hacer esa especie de escarcha de azúcar). Ya lo podemos meter al horno, que deberá estar precalentado a 180º con calor arriba y abajo. Colocamos un recipiente (resistente al calor) con agua en el horno y horneamos unos 20-25 minutos, vigilando que no se queme por la superficie.
Para el relleno, a mí me encanta la crema pastelera, pero se puede hacer con nata, trufa o incluso tal cual sin rellenar, ya como cada uno prefiera. En el relleno es donde yo escondo el haba y la figura. Y recordad lo que dice la tradición:
"He aquí el roscón de Reyes, tradición de un gran banquete
en el cual hay dos sorpresas para los que tengan suerte.
En él hay muy bien ocultas un haba y una figura:
el que lo vaya a cortar hágalo sin travesuras.
Quien en la boca se encuentre una cosa un tanto dura
a lo peor es un haba o a lo mejor es la figura.
Si es el haba lo encontrado este postre pagarás
mas si ello es la figura coronado y Rey serás."
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